Solo la inteligencia artificial incurre en sesgos.
¡Muy bien!
¡Incorrecto! Los seres humanos también incurrimos en múltiples sesgos constantemente.
Los equipos de desarrolladores informáticos están constituidos mayoritariamente por varones.
¡Muy bien!
¡Incorrecto! Los equipos de ética en la IA han criticado la tendencia a crear grupos de trabajo exclusivamente masculinos, de raza blanca o monolingües.
Según la normativa europea, todos los algoritmos en los que se basa la inteligencia artificial tienen que ser de fuente abierta.
¡Muy bien!
¡Incorrecto! Ni la legislación internacional ni la española afirman nada al respecto. De hecho, la mayor parte de los algoritmos utilizados por las empresas tienen un funcionamiento opaco.
En 2022 una inteligencia artificial: LaMDA optó por contratar a un abogado, a sugerencia del ingeniero Lemoine, con el propósito de demostrar que estaba viva.
¡Muy bien! Esto no quiere decir que hayamos creado una IA fuerte, sino que quizá sea capaz de pasar el test de Turing: imitar a seres humanos y engañarles, aunque sea insuficiente para acreditar su personalidad.
¡Incorrecto! Es una noticia difundida y probada por medios de comunicación internacionales. Lo que se debate es el alcance lógico y cibernético del hecho narrado.
